En España presumimos (y con razón) de la excelencia de nuestro cerdo ibérico. Una raza única ideal para sacar los productos cárnicos de gran calidad que se elaboran en regiones como Guijuelo. Pero, ¿qué otros tipos de cerdos nos podemos encontrar alrededor del mundo? Hagamos un pequeño repaso a las razas de este noble animal.
Las diferentes razas de cerdo se agrupan en base al color, la forma de la cabeza, el tamaño, carcter, etc. Aunque por lo general se dividen en:
- Razas padre: más gruesas, crecen más rapidamente y suelen criarse para el consumo humano
- Razas madre: de temperamento más tranquilo pero con menor rendimiento a la hora de producir alimento. Se suelen utilizar para fines reproductivos.
Partiendo de esa división podemos encontrar algunas de las más comunes como ‘Largue White’, que sea probablemente la más consumida a lo largo del planeta. Y otras más exóticas como el cerdo Duroc, rojizo, con orejas medias y erectas natural de Estados Unidos o el Cerdo Vietnamita, que generalmente no se utilza para el consuma por su pequeño tamaño y se ha puesto de moda en algunos lugares como mascota. Otras serían Pietrain, Yorkshire, Berkshire o Hampshire.
Aunque, además de estas y como decíamos en las primeras líneas, en España contamos con la quizás sea una de las razas de las que mejor materia prima se puede sacar. El Cerdo Ibérico, una raza autóctona de la península asentada hace miles de años en las dehesas del suroeste. El cerdo ibérico, con su característico color oscuro también se puede distinguir por su tipo de pelo entre negro entrepelado y negro lampiño.