En MAGUISA trabajamos con la mayor seguridad alimentaria. Nuestro objetivo es obtener todas las certificaciones necesarias para la consecución de la homologación para la exportación a países de todos los continentes. Contamos con convenios para la venta en Canadá, Japón, Nueva Zelanda o China, nuestra última consecución, entre otros.
En nuestro matadero realizamos un trabajo completo. Desde el sacrificio y despiece, como ya hemos contado en nuestro blog, hasta la expedición a los distintos lugares tanto de tratamiento de carne para su curación, como para la venta directa y consumo.
La expedición de la carne es el momento de la distribución de la misma hacia los centros de adquisición. Pero al igual que en cualquier otro proceso que se lleva a cabo en nuestro matadero, en esa ocasión, también se utiliza la mejor tecnología. Se trata de contar con todos los factores que mantengan la seguridad y bioprotección del producto. Garantizando que su calidad no se vea alterada.
En MAGUISA aplicamos todas las medidas para cumplir con la normativa de higiene. Se trata de conseguir las condiciones idóneas para la salida de nuestra carne con todas las garantías. Para ello contamos con cámaras de refrigeración con una capacidad de 8.500 metros cúbicos y 7.000 de congelación. Donde permanecen nuestros cerdos ibéricos despiezados esperando a su exportación a cualquier lugar del mundo.