Comentamos habitualmente en este blog las propiedades y beneficios que tiene el jamón ibérico. Una auténtica delicia de nuestro país que además puede ser un gran aporte para incluir en una dieta equilibrada. Aunque muchas dietas recomiendan sacar la carne de cerdo de nuestra alimentación, lo cierto es que los expertos afirman que «sin carne, una dieta ya deja de ser equilibrada».
Por eso lo ideal es buscar las formas más saludables de consumir carne, y el jamón serrano es una de ellas. Un producto que es fuente de proteínas de alto valor biológico, ya que los aminoácidos que contiene cubren las necesidades para sintetizar las proteinas. Además se trata de un alimento con antioxidantes muy importantes para la salud,
Aunque a veces se piensa lo contrario, la cantidad de grasa no es excesiva y, especialmente debemos hacer referencia a la calidad de esa grasa. Y es que cuando el jamón es ibérico certificado su grasa es una grasa insaturada rica en ácido oleico. Si es un cerdo alimentado con bellotas y siguiendo las pautas de alimentación de las denominaciones de origen ibéricas su grasa será mucho más beneficiosa que la de otros alimentos. Por no mencionar que también se encuentran en su carte vitaminas y minerales como las B12, el hierro o el zinc.