Ya estamos en la época de calor, hacemos vida en la terraza y no podemos esperar para que empiece la época de barbacoa. ¿Eres el maestro de la barbacoa en tu casa? Sea o no así te damos algunos consejos para que esas chuletas, esos chrorizos y esas morcillas queden tan jugosas y sabrosas como te estás imaginando.
Antes de nada: ten claro cuántos vais a ser antes de comprar la carne, no hay nada peor que una barbacoa en la que falta producto o en la que sobren chuletas y haya que tirarlas. ¿Un truquito? Calcular unos 400 gramos de carne por persona y distribuir en partes iguales los entrantes (chorizo, panceta, alitas, etc.)
Una vez está la carne lista llega el momento de encender el fuego, momento en el que se pueden producir muchos errores. Las brasas perfectas tienen que estar bien distribuidas, con la parrilla no muy cerca para que la carne se haga lentamente hasta estar en su punto. Si eres el encargado del fuego no debes olvidar también tener a mano todos los elementos de seguridad necesarios.
Por último habrá que asegurarse que la carne sale perfecta. Aquí se deben tener en cuenta consejos como no darle la vuelta continuamente, y en llevar un orden de los productos. Empieza con los chorizos, pancetas y morcillas y después coloca las piezas más grandes que necesitarán más tiempo. ¡Importante! No eches la sal a la carne antes de ponerla en la barbacoa, es mejor sazonar mientras se cocinan para que se absorba. Si quieres darle un toque especial utiliza otras especias como ajo, pimienta o hierbas aromáticas.